Deuda en dólares de PBA mantiene interés relativo por su premio sobre los bonos soberanos, y una mejor salud fiscal respecto al Estado Nacional.

Un almuerzo reservado a fines de octubre entre el presidente, el Jefe de Gabinete y la gobernadora de Buenos Aires, según documentaron medios locales, sirvió para descomprimir una sensación de tensión entre ambos gobiernos a partir de los recortes incorporados en el presupuesto 2019 y el desfasaje de ciertas partidas a merced del salto inflacionario no esperado.

El nuevo presupuesto nacional, que tiene como objetivo un equilibrio fiscal primario, ha reconfigurado buena parte del consenso fiscal previo entre Nación y provincias. El trabajo de la inflación sobre los acuerdos previos, también. La provincia de Buenos Aires, que alcanzó superávit primario en el primer semestre gracias a una reasignación en el reparto de tributos nacionales, reclama un adicional de $19.500 millones del gobierno nacional para mantener en términos reales lo conseguido a principios de año ($41.000M en 2018 y $65.000M en 2019).

La partida se explicaba por un monto superior de la recaudación de ganancias que iría a parar a las arcas de PBA como compensación por un Fondo del Conurbano desactualizado. No obstante, a partir de la devaluación y la inflación, la masa de recaudación nacional por IIGG se estima ahora mayor, pero el ingreso pautado para PBA se mantiene fijo en términos nominales para este año y el próximo.

Por lo pronto, Vidal señaló que “todas las posibilidades están abiertas menos ser presidenta”. Encausado el proyecto de reelección en la provincia, y dada su relevancia para el resultado nacional, sería de mínimo esperable que el Gobierno nacional intentara atender en un año electoral necesidades fiscales del distrito con el 39% de la población.

La gobernadora enviará un proyecto de ley a la legislatura para incrementar en 38% el impuesto inmobiliario, un recurso propio que hoy apenas explica el 10% de su recaudación, contra cerca de 70% por Ingresos Brutos. Al mismo tiempo, la Gobernadora busca transferir a los municipios de ciertos costos por servicios públicos, y podría profundizarse el ajuste en obras públicas.

Según últimos datos del primer semestre, PBA alcanzó un superávit primario de $11.700 M vs. Déficit de $8.279M en 2017, mientras que el déficit financiero cayó de $16.923M a $2.183M en los primeros seis meses de 2018.

Los ingresos totales crecieron 36,20% contra gastos que lo hicieron al 27,30%, según datos oficiales, lo que le facilitó al distrito más populoso el equilibrio (y superávit) en cuentas públicas que el Gobierno nacional aún no ha conseguido y se propone en 2019.

En términos de deuda, el stock total bajó a U$S12.500M desde los U$S13.650 a finales de 2017 como resultado de la devaluación. La relación deuda a producto bruto se ubicaba a fines de marzo en 6,9%, un leve incremento de 90 pbs respecto al inicio de gestión pero relativamente bajo en relación al promedio de 9,4% entre 2007 y 2011.


Rendimiento de la deuda soberana en dólares vs. Provincia de Buenos Aires

TIR/Duración

Recomendación de posicionamiento

En línea con la línea de razonamiento utilizada para recomendación de posicionamiento en deuda soberana (link al reporte), replicamos esta misma estrategia para la deuda en USD de la Provincia, privilegiando el bono Par provincial que provee protección relativa frente a un escenario adverso, a lo cual agregamos el bono de corto plazo que vence en Junio de 2019, dentro del plazo del acuerdo con el FMI y el actual gobierno provincial.

Respecto a la cartera soberana este portafolio genera una mejora en el rendimiento de entre 100 y 150 puntos básicos, dependiendo el peso que se otorgue a cada uno de los bonos recomendados. Como contrapartida, la liquidez es menor y por lo tanto sugerimos tomar esta idea para
una porción menor de una cartera adecuadamente diversificada.